Hay personas que no presentan ningún síntoma o apenas manifiestan alguno, lo que les hace pensar que es un simple resfriado o una gripe… Pero a otros, les provoca dificultades para respirar y hasta la muerte. La gravedad con la que afecta el coronavirus es distinta en cada persona.
Y si bien, hay factores externos que pueden contribuir al curso de la enfermedad, el factor clave que explica por qué unos se enferman más que otros parece estar en la respuesta inmunitaria.
¿Cómo responde el sistema inmunitario al coronavirus?
Los científicos deducen que una vez que el virus accede al cuerpo por la nariz, boca u ojos, busca entrar en las células, el único lugar en donde es capaz de reproducirse. Para evitar esto, el sistema inmunológico produce una proteína llamada interferón, que no lo deja pasar; sin embargo, el coronavirus inhibe la producción de interferones.
Ahora bien, si el virus logra entrar a la célula, el sistema inmune trata de destruirla por un mecanismo que se llama apoptosis, una muerta celular programada; pero, lo que se cree es que el coronavirus interfiere con este proceso, así como con la producción de anticuerpos.
Y a pesar de que es un virus muy fuerte, el sistema inmunitario logra ganarle en muchos casos: en el 80% de los casos, la respuesta inmune es efectiva, por eso hay tantos asintomáticos o con síntomas leves; no obstante, es en el 20% restante donde el cuadro se complica.
Lo que sucede es que cuando el sistema inmune no puede bloquear al virus, entra a las células, se reproduce y avanza por la garganta y las vías respiratorias hasta llegar a los pulmones. Cuando estas células infectadas empiezan a morir de forma descontrolada, el sistema inmunológico responde con otro tipo de células que buscan detener este proceso.
En los casos más graves, lo que termina sucediendo es que estas células que envía el sistema inmunológico provocan una inflamación generalizada del pulmón, inflamación que incluso puede ir más lejos y afectar a otros órganos, lo cual provoca lo llamado por los médicos choque séptico.
Se sabe que determinados factores como la diabetes, la obesidad y la edad aumentan la probabilidad de que los síntomas del coronavirus sean graves. Y es que estos factores provocan que la respuesta inmunitaria sea perjudicial, pues incentivan la propagación del virus en el organismo, así como la inflamación.
Lo mejor es fortalecer el sistema inmune
Por eso, es tan importante que las defensas del cuerpo estén en buena forma y no sólo para combatir al coronavirus, sino también para evitar otras enfermedades.
Esto se logra mediante una dieta saludable y variada, durmiendo una cantidad de horas suficiente, haciendo ejercicio moderado todos los días y evitando el exceso de alcohol, el tabaco y el estrés.
