Dieta alcalina: ¿Cuáles son sus beneficios?

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Por Mónica Franco Díaz, nutrióloga

Tal vez hayas oído hablar de la dieta alcalina y no sepas a lo que se refiere.

La alimentación alcalina se volvió tendencia desde hace ya un tiempo, porque tiene la capacidad para controlar el peso y reducir la acidez de la orina, la sangre y el sistema digestivo. Además, con este plan alimentario se afirma que es posible prevenir el cáncer, las enfermedades articulares, óseas y renales.

Así pues, conociendo la alcalinidad o acidez de los alimentos, así como la manera correcta de combinarlos, podrás disfrutar de una buena salud, más energía y menos enfermedades.

Analizando el pH de los alimentos

Antes de hablar de los beneficios de la nutrición alcalina, es preciso aprender sobre el pH (potencial de hidrógeno), el cual puede ser entre 0 y 14.

Cuanto más cerca del 0 se encuentre el potencial de hidrógeno, más ácido es y cuanto más cerca del 14, más alcalino. El 7 es una sustancia neutra. Estos niveles se reflejan en la sangre y la teoría indica que los alimentos alcalinizantes mejoran la salud, mientras que los ácidos la empeoran.

De entre los alimentos más alcalinos destacan los vegetales, las frutas, los cereales, condimentos y especias, así como el lactoserum suizo Lebasi.

Beneficios de una dieta alcalina

Se ha demostrado que consumir más cantidad de alimentos alcalinos que ácidos sirve para:

  • Mejorar la salud del estómago y el tubo digestivo. Esto se debe a que el estómago es muy ácido y casi ningún alimento puede cambiar su pH. Todos los alimentos que salen del estómago y van hacia el intestino son ácidos. Allí, el páncreas segrega sustancias para neutralizar estos ácidos. Si comemos más cantidad de alimentos alcalinos, el estómago reducirá los envíos ácidos al intestino y disminuirá el trabajo del páncreas.
  • Prevenir el cáncer y mejorar la acidez de la sangre. Las células cancerígenas precisan de un medio ácido para poder sobrevivir y reproducirse. Es por ello que se recomienda seguir una dieta alcalina para no darles la oportunidad de residir en el cuerpo. Algo similar ocurre en la sangre, que al estar demasiado ácida puede provocar otras enfermedades.
  • Bajar de peso. Debido a que los alimentos alcalinos suelen ser más saludables que los ácidos, llevar a cabo una dieta alcalina ayuda a controlar el peso.
  • Prevenir la osteoporosis y la acidez en la orina. Los huesos también reciben la acidez de los alimentos y esto los va debilitando hasta el punto de empezar a formarse agujeros y reducir la densidad ósea. La osteoporosis se puede evitar si se sigue una dieta más alcalina. En el caso de la orina, es preciso que no contenga un pH bajo para no enfermar a los órganos relacionados, como los riñones, la vejiga o la uretra.

En definitiva, la consecuencia de no consumir alimentos alcalinos es crear un desequilibrio en tu organismo, lo cual se traduce en:

  1. Menor capacidad del cuerpo para absorber minerales y demás nutrientes.
  2. Déficit en la producción de energía en las células.
  3. Disminución en la capacidad para reparar células que se encuentren dañadas o enfermas.
  4. Problemas para eliminar los metales pesados de la sangre.
  5. Merma en la capacidad del sistema inmune para eliminar células tumorales o combatir enfermedades.
  6. Más susceptibilidad a sufrir fatiga.
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