Día Mundial de la Alimentación: cómo llevar una dieta más saludable

Cada 16 de octubre se conmemora el Día Mundial de la Alimentación, una celebración promovida por la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), que tiene como objetivo disminuir el hambre en el mundo.

Este 2020 se hace un llamado mundial a la solidaridad para conseguir que los alimentos saludables lleguen a todo el planeta, especialmente a esos lugares más desfavorecidos y que han resultado muy dañados por la crisis causada por el coronavirus.

También se hace homenaje a los héroes de la alimentación, esas personas que plantan, cultivan, pescan o transportan los alimentos. Por ello, el lema de este año es “Cultivar, nutrir, preservar. Juntos”.

Y es que producimos alimentos más que suficientes para alimentar a todos; sin embargo, nuestros sistemas alimentarios sufren desequilibrios.

El hambre, la obesidad, el cambio climático, el desperdicio de alimentos y la falta de seguridad para los trabajadores de la cadena de la industria alimentaria son sólo algunos de los problemas que evidencian este desequilibrio.

Por supuesto, estos desequilibrios deben combatirse con políticas públicas impulsadas por los gobiernos de cada país; pero también cada individuo del planeta debe hacer conciencia y tomar acción. Una de las primeras cosas que puede hace es llevar una dieta más saludable y ser un consumidor mucho más responsable.

¿Cómo llevo una dieta más saludable?

Una persona que sigue un plan de alimentación adecuado tiene mayores
posibilidades de mantenerse saludable, desarrollarse plenamente, mejorar su rendimiento en el trabajo o la escuela y reducir factores de riesgo para ciertas enfermedades (como la obesidad o la desnutrición).

Si bien, lo mejor para llevar una dieta adecuada según nuestras características (peso, estilo de vida, edad, género, condiciones desalud específicas, etc.) es ir con un especialista en nutrición, hay algunas líneas generales que podemos ir aplicando desde hoy y que harán una gran diferencia:

• Distribuir los alimentos en 4 o 5 comidas diarias, incluyendo también dos colaciones.
• Reducir el tamaño de las porciones de alimentos ricos en grasas y calorías: frituras, dulces, chocolates, etc.
• Consumir diariamente, como mínimo, tres raciones de frutas y tres porciones de verduras, preferentemente crudas.
• Incluir en la dieta también cereales integrales, semillas y frutos secos, estos últimos de forma moderada.
• Consumir carnes rojas y blancas no más de 3 veces por semana y tomar pescado, especialmente azul, en sustitución.
• Reducir el consumo de azúcares, golosinas, alcohol y sal.
• Añadir a la dieta lactoserum suizo Lebasi: esto apoyará al organismo a recibir todos los nutrientes necesarios y regenerará la flora intestinal. Además de que elevará el sistema inmunológico previniendo y evitando enfermedades.
• Para lograr una buena alimentación, también es muy importante leer con atención las etiquetas de los alimentos envasados. Allí se indica la cantidad de calorías por cada porción, así como la cantidad de carbohidratos, grasas, proteínas, vitaminas y minerales que contienen los alimentos.
• Y para ser un consumidor más responsable, al mismo tiempo que se cuida lo que se come, es recomendable informarse de cómo y en qué condiciones se producen los alimentos. Preferir aquellas marcas o productores que cuidan en sus procesos el medio ambiente y son socialmente responsables.