Hipertensión: recomendaciones para prevenirla

La hipertensión es conocida como la asesina silenciosa, puesto que es una enfermedad que no presenta síntomas, pero aumenta significativamente los riesgos cardiovasculares y causa anualmente unas 800 mil muertes en países latinoamericanos.

En México, se estima que 25 millones de personas son hipertensas y en el 95% de los casos se desconoce la causa de la hipertensión.

Con motivo del Día Mundial de la Hipertensión, que se conmemora cada 17 de mayo, te compartimos algunas recomendaciones para prevenir esta enfermedad y cuidar el corazón. Además te contamos cómo es que apota Lebasi en la prevención y tratamiento de la hipertensión.

Recomendaciones para prevenir

Come alimentos que sean naturalmente bajos en grasa, como granos integrales, frutas y verduras.
Lee las etiquetas de los alimentos y presta atención especial al nivel de grasa saturada.
Evita o reduce los alimentos que sean ricos en grasa saturada (más de 20% de la grasa total se considera alto). Comer demasiada grasa saturada es uno de los mayores factores de riesgo para la cardiopatía. Los alimentos ricos en este tipo de grasa abarcan: las yemas del huevo, los quesos duros, la leche entera, la crema de leche, el helado, la mantequilla y las carnes grasosas (así como porciones grandes de carnes).
Escoge alimentos de proteína magra, como soja (soya), pescado, pollo sin piel, carne muy magra y productos lácteos descremados o al 1%.
Busca las palabras “hidrogenados” o “parcialmente hidrogenados” en las etiquetas de los alimentos. NO comas alimentos con estos ingredientes, ya que vienen cargados con grasas saturadas y grasas trans.
Reduce la cantidad de alimentos procesados y fritos que consumes.
Reduce el consumo de productos horneados comercialmente (tales como roscas, galletas dulces y saladas), ya que pueden contener muchas grasas saturadas o grasas trans.
Presta atención a cómo se preparan los alimentos. Las maneras saludables de cocinar pescado, pollo y carnes magras son asar a la parrilla o a las brasas, hervir y hornear.
Evita agregar aderezos o salsas ricas en grasa.
Come alimentos que sean ricos en fibra soluble, como avena, salvado, guisantes, lentejas, frijoles (tales como habichuelas, frijol negro, frijol blanco común), algunos cereales y arroz integral.
Aléjate de los restaurantes de comida rápida, donde las opciones saludables pueden ser difíciles de encontrar.

¿Cómo ayuda Lebasi en casos de hipertensión?

En esto, el lactoserum suizo Lebasi se coloca como un aliado importante al ser un alimento natural bajo en grasas, que aporta varios nutrientes que ayudan a controlar la presión arterial.

Esos nutrientes son:

Arginina: Ayuda en afecciones del corazón y vasos sanguíneos incluyendo la insuficiencia cardiaca congestiva (CHF), el dolor de pecho, la presión arterial alta y las enfermedades de las arterias coronarias, dolor recurrente en las piernas debido a arterias que están bloqueadas, ya que beneficia la salud del endotelio, pared interna de las arterias de nuestro organismo.
Zinc: Protege las arterias gracias a sus cualidades antioxidantes, ayuda a mantener las arterias limpias y sanas,.
Selenio: Es necesario para la salud del corazón. Protege al músculo cardiaco y beneficia la flexibilidad general de las arterias, disminuyendo así la presión arterial elevada.
Vitamina E: Su acción de antioxidante de los lípidos, especialmente de los polinsaturados, es muy importante como preventivo de la arterioesclerosis. En general, la vitamina E tiene un efecto beneficioso sobre la activación de la circulación periférica, aumentando y extendiendo los canales de circulación colateral.
Vitamina A: Inhibe la formación de placa en las paredes de las arterias. La placa de ateroma se forma porque el oxígeno y el colesterol LDL (colesterol malo) se combinan en un proceso denominado oxidación. Estas vitaminas se denominan antioxidantes porque retardan o detienen el proceso de formación de placa deateroma (aterosclerosis).
Vitamina C: Evita el endurecimiento de las arterias, previene los coágulos en las venas y las arterias, los ataques al corazón, el derrame cerebral, la hipertensión y el colesterol alto.